Querido Solórzano. Te escribo desde estas tierras perpetuamente estivales, mientras escuchó las campanadas de la iglesia, que el aire tupido de calor traen hasta este lugar mínimo que hoy ocupo, que insignificante y respectivamente todos ocupamos. Consciente de que no son tiempos favorables al género[…]
Storytelling
Iba conduciendo camino al trabajo, cuando se me atravesó, en esa sucesión vaga de pensamientos que tenemos cuando manejamos por rutas frecuentes, el raquítico recuerdo de un sueño de la noche anterior. Era niño y estaba en el apartamento de mi abuela, donde había crecido,[…]
Del calor que hacía la tarde parecía alargarse, pero no, eran las personas nomás que buscaban retrasar las cosas que hacer, y fue por eso que el caballo se espantó, con una de esas manchas oscuras que se hacen en los huecos donde entran las[…]
Los síntomas comenzaban de forma caprichosa y aleatoria, algunos no distinguían los sonidos o solo escuchaban el ruido de fondo de la ciudad. Otros empezaban a olvidar el significado de las palabras, no del todo, sino como el gusto de las comidas, que iban perdiendo[…]
El médico llegó al pueblo desde muy joven y fue el único durante toda su vida profesional. Venía de algún pueblo cercano y se casó con una mujer de otro pueblo de la misma región, muy parecido al pueblo del que él provenía y en[…]
Como corolario, a veces de una meta que se ha alcanzado, un viaje déjà vu que una porción privilegiada de las sociedades latinoamericanas replica una y otra vez, llevó a su hija, adolescente, y a su mujer, de viaje por Europa. El viaje tenía un condimento especial,[…]
Esta es una de las pequeñas y sorprendentes historias que Beltroni me ha contado y yo, antes de que sea demasiado tarde, quiero apuntarlas por acá. Me disculpo de antemano si la narración tiene una cadencia melancólica; es que es una historia de su juventud[…]
Esta es una historía extraordinaria que Beltroni me contó hace mucho tiempo, de la que he dudado, descreído y vuelto a creer, según a mí también me van pasando los años. La cosa era que Beltroni, ocupado en sus quehaceres veterinarios, viajaba hacia un pequeño[…]
Un estado de frustración generalizada lo paralizó frente a su biblioteca, no podía encontrar un libro cuya existencia era segura, ya que lo había leído pocos años atrás. Encontrar en cambio títulos de cuando aún no vivía en esta ciudad, ni tenía hijos, libros de[…]
La historia iba mucho más allá de que todos los sábados un pony diera sus simétricas vueltas a una plaza, montado por niños de ciudad. Su nombre era Mario, y se decía que tenía un alma humana, precisamente de un hombre que estaba pagando los deslices de[…]